El Marco de rendición de cuentas proporciona una guía detallada sobre cómo establecer y operar sitios de producción de manera que se protejan los bosques, los ecosistemas naturales y los derechos humanos. También proporciona las mejores prácticas para la restauración u otro remedio en el caso de impactos sociales o ambientales negativos.
Los productores y procesadores primarios son los más directamente responsables de aplicar prácticas de producción responsables. Los comerciantes, los compradores intermedios y las instituciones financieras también tienen una función fundamental por desempeñar. Pueden asegurar que sus políticas de abastecimiento, prácticas de participación de proveedores y actividades de financiamiento requieran, controlen y apoyen la producción responsable en el terreno.
La producción responsable implica tres componentes:
- Establecimiento del sitio La adquisición de tierras, la planificación del uso de la tierra y el desarrollo del sitio protegen los bosques, otros ecosistemas naturales y los derechos de los pueblos indígenas y las comunidades locales (Principio Fundamental 7).
- Operación en el sitio: Las unidades de producción se gestionan para garantizar la protección a largo plazo de los valores culturales y de conservación de los sitios (Principio Fundamental 8) y el pleno respeto de los derechos humanos de los pueblos indígenas, las comunidades locales y los trabajadores (Principio Fundamental 2).
- Remediación: Se proporciona restauración u otro remedio cuando las actividades de producción han causado o contribuido a impactos ambientales o de derechos humanos adversos (Principio Fundamental 9).